Los peligros potenciales de tratar la gota con Uloric
Uloric se prescribe para el tratamiento de la gota, un tipo de artritis que afecta a más de 8 millones de estadounidenses. La causa es el aumento de los niveles de ácido úrico en la sangre, que puede deberse a una función renal alterada, a factores genéticos y / o a la dieta. Es más común en aquellos que principalmente comen demasiada carne grasa, consumen grandes cantidades de alcohol y / o son obesos (los historiadores sugieren que Enrique VIII de Inglaterra había padecido la enfermedad, y se le conoce desde la antigüedad como “la enfermedad de los reyes”). Cuando los niveles de ácido úrico son demasiado altos, forman cristales, que luego se depositan en las articulaciones y los tendones, causando brotes periódicos.
Uloric funciona al deshabilitar la acción de una enzima que convierte ciertas purinas en ácido úrico. Además de un riesgo elevado de ataque cardíaco, los efectos secundarios de Uloric incluyen:
- artralgia (dolor en las articulaciones)
- diarrea
- enzimas hepáticas elevadas
- dolor de cabeza
- hemorragia
- insuficiencia hepática
- rabdomiolisis
- náusea
- erupciones en la piel
También ha habido indicios de que Uloric también puede tener efectos psicológicos. Puede encontrar una lista completa de los efectos secundarios Uloric conocidos y sospechosos en Efectos secundarios de Uloric.
La FDA emitió su alerta de seguridad inicial en noviembre 2017 después de que los resultados preliminares de los estudios de seguridad posteriores a la comercialización confirmaron los peligros de los eventos cardiovasculares en pacientes que toman Uloric en comparación con los tratados con alopurinol. Después de eso, Takeda recibió la orden de realizar estudios adicionales para determinar la naturaleza exacta de los riesgos. En última instancia, los resultados mostraron un mayor riesgo de ataques cardíacos fatales y accidentes cerebrovasculares.
En los últimos años, un número creciente de demandas por lesiones han sido presentadas por personas que han sido afectadas por Uloric, afirmando que el fabricante de medicamentos Takeda estaba al tanto de los efectos secundarios peligrosos y deliberadamente ocultó esta información a los pacientes y la comunidad médica. Estas denuncias estaban en el centro de una demanda de denunciante presentado por un ex empleado de Takeda en 2010. Aunque eso la demanda fue desestimada en 2012, el relator en el caso, el Dr. Helen Ge, ha estado intentando revivir la queja.